El escaso caudal de agua del río Paraná en Rosario y todo el litoral ya está preocupando a varios sectores afectados a este fenómeno climático que se viene produciendo en el 2020.

En el puerto local el registro llegó a marcar 0,40 mts con lo cual ya se tendría que remontar para batirla a la bajante de 1971 que tuvo un guarismo de -0,25 mts (Menos 0,25 mts) o sea 65 cm menos que la actual. O sea que es la más importante en los últimos 50 años.

De las teorías que circulan la más acertada es la relevante sequía que viene afectando al sur de Brasil desde hace varios meses, especialmente en los estados de Paraná, Matto Grosso del sur, Matto Grosso y Sao Paulo que son los que influyen sobre la cuenca del río Paraná. Todo indicaría que lo más excluyente ha sido la falta de lluvias durante los meses de noviembre, diciembre y enero en esa región. Existe además una estimación probable que el río Paraná haya ido levantado su lecho en todo su curso poco a poco y año tras año mediante el limo que arrastra en su paso por el litoral tanto es así que de esa manera se fueron formando las distintas islas no sólo de esta zona sino de mucho más al sur incluyendo las del delta de la provincia de Buenos Aires.

Las represas en Brasil poco tienen de influencia en una bajante tan marcada como ésta al momento que tampoco hay agua hacia arriba de las compuertas, por lo tanto poco pueden modificar el caudal aguas abajo. Los brasileños podrían abrir las esclusas por un período corto de tiempo pero eso sería un paliativo momentáneo y no la solución a este problema.

La actividad comercial de  tránsito fluvial se ve gravemente afectada por el nivel del Paraná pero el rubro más perjudicado sin dudas es el de la navegación deportiva. Esta imposibilidad física de poder utilizar las embarcaciones está mitigada por la cuarentena impuesta por el COVID 19 que no permite que nadie navegue por orden presidencial.

Como fuere esta bajante no es todavía la mayor de la historia pero sí pasará a la historia por ser la que más ha durado ya que son varios meses ya de río bajo. Salvo una ventana que se abrió a fines de diciembre y duró aproximadamente casi dos meses el resto del año 2019 y lo que va del 2020, el río ha pasado la mayoría del tiempo con marcas muy escasas.

A continuación se transcribe la tabla de las alturas más bajas de cada año hasta 1969 para tener una referencia real de los registros mínimos de los últimos 50 años.

1969  -0,80 mts

1970  -0,55 mts

1971  -0,25 mts

1972  1,00 mts

1973  2,33 mts

1974  1,30 mts

1975  1,45 mts

1976  1,94 mts

1977  1,74 mts

1978  1,25 mts

1979  2,04 mts

1980  3,20 mts

1981  1,63 mts

1982  3,24 mts

1983  4,29 mts

1984  3,06 mts

1985  1,63 mts

1986  1,36 mts

1987  2,25 mts

1988  1,05 mts

1989  0,75 mts

1990  2,78mts

1991  1,92 mts

1992   3,47 mts

1993   2,19 mts

1994   2,16 mts

1995   2,19 mts

1996   1,68 mts

1997   2,62 mts

1998   3,87 mts

1999   1,54 mts

2000   1,56 mts

2001   1,31 mts

2002   1,58 mts

2003   1,82 mts

2004   1,55 mts

2005   1,53 mts

2006   1,45 mts

2007   1,86 mts

2008   1,55 mts

2009   1,02 mts

2010   1,75 mts

2011   2,40 mts

2012   1,56 mts

2013   1,56 mts

2014   2,10 mts

2015   2,61 mts

2016   2,12 mts

2017   2,28 mts

2018   1,55 mts

2019   1,29 mts

 

Por alvaro casals