Yannick Bestaven – Maître CoQ IV

“¡Gracias por la bienvenida! Esta llegada es excepcional, a pesar de la situación de salud. En tiempo de Covid-19, es genial, todos los esfuerzos que habéis hecho.

Mi objetivo ya era terminar la Vendée Globe. En 2008, me había desarmado, es una frustración que no pude superar durante mucho tiempo, fue difícil. Salí con el objetivo de terminar esta Vendée Globe, y bastante bien porque tenía todas las cartas a mi favor: un gran patrocinador, un equipo profesional a mi alrededor, un buen barco, experiencia, madurez. Terminar bien puede significar estar entre los cinco primeros, luego, cuando estás entre los cinco primeros, te dices a ti mismo ‘¿Por qué no un podio?’ Cuando pude tomar la iniciativa, realmente pensé que había algo que podía hacer. A medida que avanzaba la carrera, quedé atrapado en el juego. Hubo alegrías y averías. Es parte del maratón.

Cuando estaba frente a Brasil perdiendo mi ventaja de 400 millas, ya no podía creerlo. Para todos los regatistas que van a cruzar la meta, ya es una victoria: del primero al último, todos han ganado. Todos experimentamos altibajos; esta carrera se compone de acontecimientos inesperados y pruebas que superar. Como decía Michel Desjoyeaux, «La Vendée Globe es un dolor en el culo todos los días». Fue el caso de todos nosotros, y todos aquellos que podían reclamar la victoria creyeron en un momento que se detendría.

La clave quizás sea una buena preparación de antemano, tener un buen séquito. Salí con mucha calma. Sabía lo que significaba dar la vuelta al mundo solo, que era peligroso y arriesgado. Partí sin estrés en las mejores condiciones. La semana antes del inicio, me descomprimí bien, estaba zen. Mi padrino nunca me presionó «. 

Un esfuerzo de equipo

«Es más que un equipo, es una familia. Es una historia maravillosa. Los planetas se alinearon cuando conocí al jefe de Maître CoQ, luego conocí a Bilou. Formamos un equipo que combinaba gente de Bretaña y La Rochelle y funcionó Bueno. Reunimos un gran equipo. Espero que sigamos juntos.
La preparación mental no fue mi primer enfoque inicialmente. No lo puse en el trabajo en comparación con la preparación del barco. Tuve que elegir algunas velas porque no tenía un presupuesto extra. Entendí que la Vendée Globe no era solo una carrera de pura velocidad, sino también una carrera mental. Hice esta preparación y me transformó (risas) «.

El efecto escoffier 
¿Por qué el nuestro no se rompería también? Fue un momento difícil. Felicito a Jacques Caraës y a todo el equipo, Christian Dumard también. Los tuvimos al teléfono, la situación se manejó de una manera muy profesional, la emoción se dejó de lado. ¡Lo manejaron con tanta compostura! Es gracias a ellos que Kevin se salvó «.

El camino de regreso 
«Hubo la opción norte que tomé para pasar al oeste de las Azores. Esto me devolvió la confianza después de perder tantos kilómetros. Tuve grandes problemas con la vela desde el Cabo de Hornos. En la virada de alcance en la que íbamos Navegaba bajo J3 en lugar de J2 y de hecho logré aguantar. Y recuperé la confianza. Tenía las velas para ir con vientos fuertes, así que era lo único que tenía que hacer si quería llegar -Atrás. Hubo momentos en los que dije que tenía demasiada área de vela arriba, pero no quería reducir. El barco estaba bien, podía dormir. A veces era agradable. ¿Pongo en un arrecife? Oh no , Esperaré un poco. Cuando empieces a subir, es agradable «. 

Que recuerdos
“Tengo muchos buenos recuerdos, clasificarlos es difícil. El descenso al sistema de alta presión de St. Helena con Boris, que me filmó con su dron, ¡estábamos a punto de parar para tomar una copa! El momento inolvidable fue estar en Cabo de Hornos a la cabeza. Fue un gran momento porque salía de condiciones climáticas complicadas. Dudé en reducir la velocidad para dejar pasar la depresión. Estaba a 200 millas por delante de Charlie, creo, así que me dije a mí mismo no debería reducir la velocidad. Nunca había visto mares tan grandes como las 24 horas antes del Cabo de Hornos. Eran casi 10 metros, creo. Mientras conducía hacia las olas, volé mi polea de proa. Estaba surfeando a más de 32 nudos, y me detuve de golpe, terminando en los mamparos de la litera. ¡Ahora tengo ganas de tomarme una buena cerveza y de fiesta! Tendremos que pensar en lo que sigue cuando hayamos descomprimido, todo a su tiempo «. 

¿Láminas pequeñas o láminas grandes?
«Gané con floretes pequeños, pero esa no es razón para mantener floretes pequeños. Sé que hubo mucho debate. Los barcos con floretes grandes se rompieron mucho. Pero otros todavía están en el juego: L’Occitane en Provence lo está haciendo muy bien. Tienes que verlo como un turbo, porque no puedes usarlos todo el tiempo. En el sur, no puedes ir más rápido, pero cuando las condiciones son adecuadas, es realmente un acelerador. No debes ignorar el fiabilidad de estas láminas. Tendremos que pensar con la clase IMOCA en cómo evitar puntos de entrada de agua si arrancamos una lámina. Los barcos deben permanecer insumergibles. Pero es cierto que las láminas grandes son la solución «. 

Charlie Dalin  
Felicité a Charlie por su muy buena carrera. Luchó por cruzar la meta primero. También le agradecí su reacción, reaccionó como un verdadero deportista, a pesar de las polémicas que escuchamos. Cruzó la meta primero en real tiempo, es segundo en tiempo compensado. Le dije que dentro de cuatro años sería él quien ganaría el trofeo, ¡y que es duro!»