Un coloso oculto bajo Latinoamérica: El misterioso río subterráneo que la ciencia aún no comprende

Bajo la selva amazónica, en lo más profundo de Sudamérica, fluye un río invisible a los ojos humanos. Su existencia fue revelada en 2011, pero sigue envuelto en incertidumbre. Con 6.000 kilómetros de extensión, avanza de manera imperceptible, desafiando lo que sabemos sobre la geografía del continente. ¿Es realmente un río o algo completamente diferente?
Cuando pensamos en ríos colosales, el Amazonas es la primera referencia: el más caudaloso y extenso del mundo. Pero lo que pocos saben es que, bajo su cauce, en las profundidades del continente, fluye otro gigante silencioso, cuya existencia desafía el conocimiento científico.
Se trata del río Hamza, un torrente subterráneo descubierto en 2011, que se extiende desde los Andes hasta el Atlántico. Aunque recorre la misma distancia que el Amazonas, su flujo es casi imperceptible, y su naturaleza ha dividido a los expertos.
Las primeras sospechas surgieron entre las décadas de 1970 y 1980, cuando se detectaron anomalías térmicas en 241 pozos profundos excavados en la región. Pero no fue hasta el 12º Congreso Internacional de la Sociedad Brasileña de Geofísica, en 2011, que el mundo conoció oficialmente la existencia del Hamza.
El nombre fue elegido en honor al geofísico Valiya Mannathal Hamza, quien lideró las investigaciones. Sus estudios demostraron que bajo la cuenca amazónica fluye un inmenso volumen de agua subterránea, aunque de una manera radicalmente distinta a la de un río convencional.
Un río que no se mueve como los demás
A diferencia del Amazonas, que avanza con un caudal de 209.000 metros cúbicos por segundo, el Hamza apenas alcanza 3.090 m³/s. Y mientras el Amazonas recorre kilómetros en cuestión de horas, el Hamza se arrastra lentamente, desplazándose apenas 100 metros por año.
Otras características de este río oculto:
– Flujo vertical: Comienza cayendo en picada antes de moverse de forma horizontal.
– Profundidad extrema: Puede llegar hasta 4.000 metros bajo tierra.
– Ancho impresionante: Entre 200 y 400 kilómetros, más del doble del Amazonas en algunos tramos.
– Destino incierto: Se cree que desemboca en el Atlántico, pero aún no se sabe exactamente dónde ni cómo.
¿Es un río o algo más?
Desde su descubrimiento, el Hamza ha generado controversia. ¿Debería ser considerado un río? A diferencia de los ríos convencionales, no fluye por un cauce definido, sino que se filtra entre rocas sedimentarias, lo que lo hace muy diferente de cualquier otro cuerpo de agua superficial.
Algunos científicos creen que debería catalogarse como un enorme acuífero en movimiento. Otros insisten en que su tamaño y recorrido lo convierten en un verdadero río subterráneo.
Pero lo más inquietante es que todavía hay mucho que no sabemos. ¿Qué secretos esconde este coloso oculto? ¿Cómo afecta al ecosistema amazónico? ¿Qué más podría estar fluyendo en las profundidades de Sudamérica?
El río Hamza sigue siendo un enigma bajo la selva, un gigante silencioso que, por ahora, permanece fuera de la vista, pero no del misterio.