Uno de los proyectos de exploración de superyachts personalizados más secretos del mundo, el casquete polar de Lürssen, está fuera del dique seco en el astillero y, por primera vez, se ve en forma física.

Icecap, o Project Icecap, se anunció a principios de 2018. Solo unos meses después, Moran Yacht & Ship anunció que Icecap se había vendido a un comprador secreto en ese momento. Se retuvo la solicitud, pero el precio informado es de 350 millones de dólares. Pero la correduría de barcos de lujo dijo entonces que, una vez terminado, Icecap estaría entre los más grandes e innovadores del mundo.

Icecap está fuera del dique seco, lo que significa que se ha visto en forma física (a diferencia de los renders) por primera vez. En construcción en el astillero Peene-Werft en Wolgast, Alemania, está en camino para una entrega en 2023. Con 107 metros (351 pies) de eslora total y un volumen interior superior a 6500 GT, Icecap será, de hecho, uno de los superyachts más grandes del mundo cuando se entregue. Sin embargo, lo que finalmente lo diferenciará será el rendimiento.

Más tarde se reveló que el propietario de Icecap era el multimillonario canadiense John Carter Risley, el fundador de Clearwater Seafoods y un ávido pescador, marino y experimentado propietario de embarcaciones. Explicó que su segundo Lurssen, Icecap, surgió de una comprensión de las limitaciones de los barcos más pequeños.

“Mi primer amor es navegar, absolutamente” , explicó. “Habiendo dicho eso, si vas a pasar mucho tiempo en el agua, debes darte cuenta de que hay límites asociados con la navegación, especialmente cuando se trata de viajes más largos y la logística que conlleva”.

Risley creía que más grande era mejor, pero no solo porque sí: más grande era mejor porque significaba cosas diferentes. Con Icecap, esto incluía un sistema de propulsión híbrido, grandes bancos de baterías en lugar de generadores para ejecutar las funciones del hotel, «ahorro de energía de última generación, almacenamiento de energía, calefacción y refrigeración», más espacio para almacenar todo tipo de equipo (pero no submarinos, porque es claustrofóbico), una sala de máquinas rediseñada para albergar tres motores Wärtsilä para mejorar el rendimiento y el alcance, y un casco de clase de hielo. Y estas son solo las características reveladas a los medios.

Icecap tendrá una cubierta de popa muy amplia, con un helipuerto que baja el avión al almacenamiento, garajes laterales amplios para embarcaciones auxiliares y equipo de buceo, y alojamiento para hasta 20 invitados en 10 cabinas. Habrá una sala de observación en la cubierta superior (Icecap tiene cinco cubiertas en total) y comodidades de lujo del tipo que esperarías de una embarcación personalizada.