Los voluntarios de la Royal National Lifeboat Institution (RNLI) de Great Yarmouth y Gorleston recibieron una llamada inusual a principios de esta semana cuando recibieron informes de un gato varado en la orilla de un río.

La tripulación del RNLI se apresuró hacia donde el gato estaba aferrado a una cornisa, sin embargo, justo antes de la llegada del bote salvavidas, el gato cayó al río.

La tripulación del bote salvavidas sacó al gato que luchaba fuera del agua y lo subió al bote salvavidas y lo envolvió en una manta. El felino empapado fue entregado a la Guardia Costera de Gorleston y llevado al refugio RSPCA.

“Una vez en el bote salvavidas, envolvieron al gato en una manta y lo mantuvieron tranquilo”, dice Dave Kilpatrick, director del RNLI. Parecía contento de vernos. Una vez en tierra firme, le dieron un poco de salmón de la pescadería, que disfrutó.

“Desde entonces, la tripulación del bote salvavidas supo que el gato se llama Icicle y que sus amados dueños lo recogieron poco después de que lo llevaran al veterinario. Ahora está de vuelta en casa sano y salvo”.