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Renovado esplendor

BARCOS EN FORT LAUDERDALE INTERNATIONAL BOAT SHOW 2019 – 60 YEARS.

“ Sesenta años de la muestra náutica más importante de América y del mundo; FLIBS brilló en forma especial, con más de mil quinientas embarcaciones, mil doscientos expositores, distintos lugares de muestra y un impresionante despliegue de industria americana y de distintas partes del globo. Nuevamente, como cada año, no deja de asombrarnos”.

 Enviado especial: Gustavo Revel

Mundo bastante convulsionado por estos tiempos. Ningún continente goza de buena salud social y económica, en términos generales. Pero al volver a Fort Lauderdale cada año, nada de eso parece cierto. Desde el 30 de octubre hasta el 3 de noviembre pasado, esta muestra propuso al nauta amante del motor, un universo de posibilidades para navegar. Justamente se celebraron 60 años de salones realizados en esta ciudad, la Venecia americana. Tan vasta experiencia, permite mantener razones claras para tantos años de singular éxito. Flibs expone todo en un solo lugar (mejor dicho, en puntos claves y cercanos): embarcaciones de todos los portes y tipos, sistemas, servicios, motores, accesorios y todo lo que esté vinculado a la náutica recreativa (término correcto en comparación a la palabra placer, incorrectamente usada en nuestro país). A diferencia de algunos salones europeos, donde la tendencia es descentralizar de acuerdo a esloras y valores, Fort Lauderdale pone sobre agua y tierra toda la oferta local y extranjera. Allí el potencial público observa, compara, analiza precios, las ofertas exclusivas del salón y si está convencido, cierra el trato. Nada queda fuera: desde una lancha a un megayate, desde un motor a un accesorio o desde equipos de pesca a una Ferrari. La industria y mercado americano tiene esa inercia fabulosa para seguir moviendo todo el sector, y por supuesto, el made in USA es para muchos visitantes, indiscutido. Pero, las puertas están siempre abiertas para las marcas internacionales que quieren posicionarse en este gran mercado, buscando su tajada: ¿competencia hostil? En absoluto, es sólo oferta y demanda, que se retroalimenta año tras año ofreciendo más y mejores productos. Muchos ejemplos pueden tenerse en cuenta: las fábricas de motores fuera de borda son tal vez las más agresivas. Las japonesas disputan cada año el liderazgo de la americana Brunswick (Mercury), y en cada nuevo show compiten con potencias mayores y más modelos disponibles. La elegancia y diseño europeo, ostentado en megayates, yates y tenders producidos en el viejo continente, se pavonean entorno a los diseños americanos, de similares características, pujando de igual a igual. En esta muestra, se presentaron barcos construidos en Dubai, de altísima calidad y vendidos rápidamente en el show. Hay público expectante y ávido de tecnología, propuestas y novedades. Es siempre sorprendente ver como es el servicio de venta hacia el cliente, la oferta, el formato de pago, la hipoteca náutica, el crédito bancario -totalmente restablecido luego de la crisis de la década anterior-. Por supuesto, estos comentarios no son comparables para nuestro pequeño mercado argentino, ya que nuestra siempre frágil economía sumado al factor de escala de esta muestra, pulveriza nuestra producción nacional, que humildemente mantenemos con un esfuerzo titánico a lo largo de nuestra historia. Este año, FLIBS reasignó la organización general, hoy en manos de Informa. Los cambios organizativos se notaron, sin demasiados problemas pero con algunos ajustes a realizar que, seguramente, el año próximo serán mejorados.

Resumir la muestra en pocos caracteres no es fácil, pero sí destaco que el mercado de pesca americano, con sus equipos center console y yates con tuna towers, sigue latiendo tan fuerte como siempre. Las motorizaciones fuera de borda no paran en ganar popas, en reemplazo de los dentro fuera e internos. Muchas embarcaciones de hasta 30 pies (open) amplían su volumen de proa para aprovechar ese sector y siguen optimizando las popas, con generosos solariums y partes móviles;  los tenders de lujo, con sugerentes comodidades bajo la consola central, multiplicaron su oferta. Semirrígidos de mediana gama mantienen infinidad de modelos para ser utilizados como auxiliares o embarcaciones intermedias, pero aún no logran la presencia y demanda que en Europa tiene este excelente segmento de mercado. Los cabin cruisers de hasta 32/34 pies siguen optimizando volúmenes, ampliando superficies internas y externas. La oferta de yates de hasta 80/100 pies es la que más se renueva cada año: el fly vuelve a ser la opción más buscada contra muchas hard top hoy redefinidas; de hecho, los fly bridges se han extendido y ampliado, con techos superiores de importancia; la superficie vidriada en superestructuras es, en algunos casos, excesiva. Muchos yates medianos han crecido en puntal y superestructura, algo así como una versión reducida de algunos diseños mayores. Los megayates, como opción de máxima, comparten un mercado en los dos lados del océano y son desarrollos superiores, una industria one off de alta gama que se enfoca en un nicho de mercado muy especial, ya que no sólo son embarcaciones exclusivas de un propietario sino también de empresas o corporaciones que invierten en el proyecto de estos refinados barcos para luego chartearlos. Lo que sigue en ascenso y seguramente en los próximos salones será la vanguardia es la motorización eléctrica y los foilers. La fiesta acumuló más de cien mil visitantes y al cierre de esta edición no teníamos aún el volumen de negocios logrado, que siempre supera varios cientos de millones de dólares. Un apretado resumen de muestras gráficas seleccionadas entre miles de propuestas.

barcos@barcosmagazine.com

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