El constructor de barcos británico Princess Yachts ha confirmado que planea recortar aproximadamente 250 puestos de trabajo en su astillero de Plymouth, citando «condiciones de mercado desafiantes» y la necesidad de racionalizar sus operaciones.

El fabricante de yates de lujo, que actualmente emplea a unas 2.700 personas, está entrando en un período de consultas con los representantes sindicales y los empleados afectados. Los despidos, que representan poco menos del 10 por ciento de la fuerza laboral, afectarán principalmente a los roles pagados por hora en varias áreas operativas.

En un comunicado compartido con MIN, la firma dice que esto implicará «racionalizar algunos de sus procesos para construir una operación más flexible en torno a su gente más experimentada y capacitada» con un «mayor enfoque en la calidad y la eficiencia operativa».

Esto se produce tras un periodo financiero difícil, en el que Princess Yachts informó de una pérdida antes de impuestos de 69 millones de libras esterlinas en 2022.

En un comunicado compartido con el personal y los medios de comunicación, el CEO Will Green dice que 2024 ha sido un «año de cambio importante» para la compañía, con avances significativos en la mejora de la eficiencia y el lanzamiento de nuevos productos.

«No hemos sido inmunes a la recesión mundial que ha estado afectando a la industria», dice Green. «Tomar cualquier decisión que afecte directamente los empleos de las personas siempre es difícil, pero tenemos la responsabilidad con todo el personal de garantizar que tengamos un negocio sólido. Estoy seguro de que estos ajustes, junto con el progreso que hemos logrado en nuestros planes de reestructuración este año, apuntalarán un negocio mucho más sólido a largo plazo y nos permitirán concentrarnos en lo que mejor sabemos hacer: construir yates de la más alta calidad en el mercado».

Princess Yachts atribuyó algunas de sus dificultades financieras al aumento de los costos, las interrupciones de la cadena de suministro y los retrasos en la entrega de componentes clave. La compañía también se ha enfrentado a presiones derivadas de las políticas gubernamentales, incluidas las medidas fiscales que Green describió como «gravemente afectadas» a su plan de recuperación.

No obstante, una sólida cartera de pedidos y la inversión de la firma de capital privado KPS Capital Partners, que adquirió el negocio en marzo de 2023, han respaldado sus operaciones y apuntalan los planes de crecimiento futuros. KPS inyectó alrededor de 54 millones de libras esterlinas en la empresa, lo que permitió inversiones en su planta de producción de South Yard y otras áreas.

Los despidos se producen después de una ronda más pequeña de despidos a principios de este año que afectó a alrededor de 40 puestos de oficina.

La compañía dice que sigue centrada en el lanzamiento de nuevos modelos, como el S80 y el S65 introducidos en 2024, y el F58 y el V65 previstos para 2025. Green argumenta que estas medidas ayudarán a construir un «negocio más fuerte en previsión de que el mercado vuelva a la normalidad».

En declaraciones a la BBC12, el diputado de Plymouth, Luke Pollard, describió los recortes de puestos de trabajo como «malas noticias para todos los afectados» y enfatizó la importancia de Princess Yachts para la economía local. «Garantizar que puedan seguir operando de manera sostenible es vital», dijo, y agregó que el momento de los despidos, justo antes de Navidad, hizo que las noticias fueran aún más difíciles para los empleados.

En su comunicado, Princess Yachts reiteró su compromiso de apoyar a los empleados a través del proceso de consulta y dijo que los despidos, aunque «desafortunados», son necesarios para la sostenibilidad y el éxito a largo plazo de la empresa.