Un hombre de Nebraska ha batido un récord mundial después de remar 38 millas por el río Missouri en un «bote» hecho a mano con una calabaza ahuecada.

Duane Hansen aplastó el récord mundial Guinness el sábado 27 de agosto de 22, un día después de cumplir 60 años, mientras estaba sentado en la calabaza de 384 kg llamada ‘Berta’, que él mismo cultivó.

Las fotos publicadas en las redes sociales muestran al hombre de 60 años, que cultiva calabazas grandes y verduras como pasatiempo, agazapado dentro de la calabaza flotante gigante, que tenía un práctico soporte para latas de cerveza tallado en un costado. Según los informes, Hansen tardó 11 horas en completar el viaje.

“Fui 38 millas río abajo sin pararme en esa calabaza y todavía me dolían las rodillas”, dice Hansen en un video publicado por Reuters. “Probablemente no intentaré esto de nuevo. Si alguien rompe este récord, me inclinaré ante ellos porque son duros”.

Hablando con la publicación local Omaha World Herald, Hansen revela que navegó colisiones con un banco de arena y una roca, así como bajas temperaturas y fuertes lluvias.

“Pensé, ‘Voy a remar más fuerte y calentar.’ No estaba pensando en renunciar”, dice. “Recorrí otras cuatro o cinco millas y volvió a llover. Berta está solo a unas ocho pulgadas por encima de la línea de flotación. Nunca había prestado tanta atención durante tanto tiempo en toda mi vida. Fue difícil.»

Hansen invitó a los funcionarios de la ciudad a actuar como testigos de su logro, para que fuera reconocido oficialmente por Guinness World Records. Las autoridades dijeron que Hansen partió por el río Missouri alrededor de las 7:30 a. m. y completó su viaje poco después de las 6:30 p. m.

Un informe del Washington Post dice que los resultados aún están pendientes de validación, pero que el viaje de Hansen sería elegible para batir el record actual de «viaje más largo en bote calabaza». Este récord lo tiene actualmente Rick Swenson, quien viajó 25.5 millas en Grand Forks, Dakota del Norte, en 2016.

Hansen enfrentó muchos otros desafíos además del dolor de rodillas en su viaje. Le dijo a News Channel Nebraska que había tenido que “estar al tanto todo el tiempo”, con las olas de los barcos que pasaban amenazando con volcar su calabaza más de una vez.

“Tienes que parar todo y aguantar y navegar con esas olas. Eso estuvo mal”, dijo.

En las redes sociales, los juegos de palabras con calabazas han estado llegando de todo el mundo. Una publicaciòn de Twitter sobre el viaje de Hansen ha ganado más de 127,000 ‘me gusta’, con muchos comentarios que desean ‘velocidad de calabaza’ para ‘Cinderfella’. Otro comentario popular simplemente pregunta: “¿Por qué?”

News Channel Nebraska le preguntó a la esposa de Hansen, Allyson, cómo se siente tener un esposo que ostenta un récord mundial. “Nunca sé qué será lo siguiente”, dice.