El barco estaba en peligro y tomando agua después de un incendio que dejó sin energía al barco.

El barco vieira de 43 metros estaba a unos 220 kilómetros de la costa y los fuertes vientos y el mar de seis a ocho metros complicaron el rescate, según CBC .

El capitán y tres miembros de la tripulación permanecieron a bordo inicialmente, mientras que los otros 27 fueron retirados del barco uno por uno. Los ascensores individuales significaron que los equipos de rescate realizaron esta maniobra con el helicóptero 27 veces.

“Este fue uno de los rescates más locos de los que he formado parte, por la situación y la cantidad de izados que tuvimos que hacer y lo difícil que fue tratar de calmar la aeronave para que recogieran a los sobrevivientes”, Phillip Morales, electricista de aviónica de primera clase, con la Guardia Costera de los Estados Unidos, dijo a CBC . «Fue muy, muy desafiante».

Fueron necesarios varios viajes en dos helicópteros para sacar a la tripulación del barco.

Los guardacostas canadienses y estadounidenses, así como varios barcos de pesca en alta mar, incluidos Cape LaHave, Maude Adams, Atlantic Preserver y Atlantic Protector, acudieron en ayuda de la tripulación, según Ocean Choice, propietaria del barco.

“Fue un gran alivio para todos nosotros. Estuvimos en contacto toda la noche y realmente nos preocupamos por la tripulación a bordo y nos aseguramos de que llegaran a casa sanos y salvos”, dice Martin Sullivan, director ejecutivo de Ocean Choice.

El capitán y tres miembros de la tripulación permanecieron a bordo, junto con dos técnicos de búsqueda y rescate. Se las arreglaron para restaurar la energía y comenzaron a bombear agua fuera del Atlantic Destiny . Pero esos esfuerzos fueron finalmente ineficaces.

Alrededor de las 08.00 horas del miércoles, todos salieron del Atlantic Destiny hacia el buque de la Guardia Costera canadiense Cape Roger.

Atlantic Destiny se hundió poco después.