A principios de década del ’40, el Astillero Pagliettini presentó la primera lancha de paseo, que se construyó en serie en nuestro país: la Pagliettini 460

Esta embarcación, equipada con un motor Ford V8 de 60 hp pasó a ser el modelo más popular de aquella época, uno de los primeros diseños de lanchas de Oscar Pagliettini altas prestaciones para esos años, donde orillaba los 70 km/hora.

También fue muy bien recibida por los deportistas motonáuticos de la época. Una de ellas, la CUCO, timoneada primero por Gino Regnicoli, (en opinión de quien firma esta nota, el mejor piloto de la historia de la Motonáutica Argentina) y más tarde por Juanita Pereda, triunfó en gran cantidad de regatas, compitiendo y derrotando a los ases de la época.
Entre ellos Oscar, Juan y Roberto Galvez al no poder correr en auto por la falta de neumáticos, situación originada por la segunda guerra, competían en esta clase con lanchas Pagliettini gemelas a la CUCO. Otro destacado timonel que compitió con una de ellas fue Héctor Sarthou, padre de Juan Carlos y Néstor Sarthou.
Jorge Regnícoli se contactó, a través de una gestión de Juan Carlos Zamora, secretario del Museo Náutico Argentino, con su propietario, Mario Valet, quien accedió a vendérsela. La lancha fue restaurada en el Astillero Regnícoli, con tal grado de perfección que fue nominada y premiada como la mejor unidad de la Exposición Autoclásica 2023 que, como todos los años se realizó en la segunda semana de octubre en el hipódromo de San Isidro.
Así, la CUCO pasó a engrosar la lista de embarcaciones de motonáutica, vela, esquí acuático y canotaje que el Museo Náutico ha recuperado para nuestra historia.

Por: Germán Barbot – Museo de la Náutica