Una ballena beluga varada en el río Sena de Francia murió el 10 de agosto, durante una operación de rescate destinada a devolverla al mar.
Las autoridades locales del departamento francés de Calvados confirmaron que: «A pesar de una operación de rescate sin precedentes para la beluga, nos entristece anunciar la muerte del cetáceo».
La beluga había nadado en el río a principios de esta semana después de perderse, y fue vista por primera vez nadando río arriba desde el Canal de la Mancha el martes 2 de agosto. Los esfuerzos para alimentar a la beluga desnutrida, que se había vuelto peligrosamente delgada, habían fallado.
El anuncio se produjo horas después de que los rescatistas intentaran transferir la ballena a una cuenca de agua salada en Normandía. Los rescatistas usaron una red y una grúa para sacar a la ballena de 800 kg del río, en una operación de seis horas esta mañana.
El animal había sido puesto en una barcaza, con alrededor de 12 veterinarios disponibles para brindarle atención, antes de que lamentablemente muriera. Las autoridades tenían la intención de colocar a la ballena en un camión refrigerado y transportarla a la ciudad costera francesa de Ouistreham para un período de cuidado.
Las ballenas beluga, que pueden alcanzar los cuatro metros de largo, son una especie protegida que suele verse en las regiones frías del Ártico. La aparición del animal en el Sena ha despertado la preocupación de los expertos en biodiversidad. La ballena se dirigía río arriba hacia París, antes de llegar a una esclusa a 70 km de la capital, donde permaneció desde entonces. Actualmente no se sabe cómo la ballena terminó tan lejos de su hábitat habitual.