El evento de septiembre en Lelystad en el corazón de Holanda «definitivamente no tendrá lugar».
El show de barcos HISWA-in-Water 2020 ha sido cancelado debido a COVID-19, dando otro golpe al sector de navegación holandés que ya se está recuperando de una pandemia que le ha causado un daño estimado de € 1.100 millones hasta la fecha.
El evento en el agua del 2 al 6 de septiembre en Lelystad, un lugar de navegación popular en el corazón de Holanda, «definitivamente no tendrá lugar», dice el organizador de exposiciones HMM Exhibitions.
Es un gran golpe para el espectáculo HISWA-in-Water de 36 años. El año pasado, registró un récord de 30,000 visitantes. El sector holandés había esperado, ya que se celebraría en septiembre, proporcionaría alivio para una industria maltratada.
Geert Dijks, jefe del lobby del comercio recreativo y de navegación HISWA-RECRON, dice que el Grupo HISWA Orange Yachting, una alianza de 22 constructores de embarcaciones de hasta 20 metros, había planeado invitar a más visitantes extranjeros al espectáculo en el agua.
«La cancelación del programa definitivamente afectará las ventas, especialmente para los barcos más grandes», dijo a IBI. “Algunos clientes compran en los meses posteriores al espectáculo. Pero están desapareciendo en un momento que es necesario para una recuperación de 2021 «.
Estima los daños a la navegación holandesa y las industrias relacionadas en unos € 1.100 millones y dice que la ayuda del gobierno produjo beneficios mixtos. «Los fletadores de yates de vela clásicos verán una caída en la facturación de más del 75%. Navegando escuelas en un 63% y constructores de barcos y su cadena de suministro en un 50% «, dice Dijks.
Estima que, en promedio, el 75% de las empresas del sector holandés recibió ayuda de esquemas de compensación del gobierno. De la flota chárter y las escuelas de vela, el 100% lo hizo. Pero solo el 65% de los puertos deportivos y el 35% de los constructores de barcos y sus proveedores. Las tasas de absorción de ayuda diferían ya que la financiación de emergencia era ayuda a corto plazo. «Los constructores de yates y su cadena de suministro solo sentirán el dolor del virus corona en el mediano plazo», dice Dijks.
Además, dice, algunas ayudas no eran apropiadas para muchas empresas intensivas en capital o estacionales. La producción y el suministro de materiales de los EE. UU., Gran Bretaña y China ya se estancaron en febrero, un problema grave para un país pequeño que depende en gran medida de la exportación, y los clientes potenciales del extranjero apenas viajaron para ver corredores y astilleros en los Países Bajos.
Dijks dice que el futuro inmediato es difícil para las empresas más pequeñas y vulnerables con poco efectivo. “Es importante apoyar a las industrias manufactureras relacionadas con la construcción de yates y retener profesionales y técnicos. Ese es el núcleo de la industria. Es por eso que nos centramos en el soporte de liquidez a largo plazo, especialmente el soporte de nómina. Ya sea que pague al personal despedido o a la empresa. No hace ninguna diferencia para el gobierno, pero es importante para la empresa «.
